lunes, agosto 31, 2009

Mi vida, mi muerte



Eterna,
la tormenta se estrella
en espejos que reflejan
la locura;

impuesta por bocas,
se pierde en el símil de la vida.

A lo lejos los Magos de Oriente
declinan apaciguar la pregunta no nacida

¿Cuándo he de partir?

2 comentarios:

Horacio Fioriello dijo...

late en la garganta la pregunta y la respuesta muda solo se atreve a los otros, nunca yo hoy!ese "hoy" no es nuestro.Distante y caotica mi muerte solo pertenece a un futuro tan lejano como inalcansable.
Intranferible como un tramite personal y profundo yo voy , con mi atado de papeles bajo el brazo, solo nuestro nombre importa, elle espera, no llamara por numero.
Hay en tus impecables versos una profunda base filosofica Carmucha.
Besos
Horacio

carmen dijo...

Gracias Horacio, es un placer tu presencia y tus palabras.
Me gusta permanecer en mi loca quietud y desvanecerme en ella. Sabes, a veces me inquieta esperar con paciencia mi partida ¿Me estaré volviendo loca? :))
Un abrazo