-1-
¿Oyes?
Es la voz en la tormenta.
No se desgrana ni se lamenta,
sólo compone un mundo que encadena.
Palabras que nacen y mueren
-2-
Vivo pegada al reflejo de mi misma
dónde el verbo,
atrapado en la garganta
se niega a nacer.
-3-
Palabra,
rebuzna,
y desentiéndete de mi.
2 comentarios:
Hay palabras que no saben rebuznar como deben.
Hay rebuznos que no encuentran las palabras.
Es cierto, tienes razón. Entonces es mejor el silencio, a veces.
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